Culiacán, Sinaloa; 19 de octubre de 2021 (Prensa Tomateros).-Durante su trayectoria con los Tomateros de Culiacán, José Guadalupe Chávez ha tenido una relación muy directa, con momentos clave en los campeonatos.

En la 2017-18, en la novena entrada, los guindas estaban a dos outs de perder el séptimo de la final en Navojoa. Chávez entró como emergente y negoció BB, para luego anotar la del empate. Tres episodios más tarde, el equipo terminó con el trofeo.

Y más recientemente, el shortstop guinda pegó imparable decisivo en el séptimo juego de la semifinal 2019-20 contra Cañeros de Los Mochis, para así avanzar a la serie por el título contra Venados.

Chávez llegó en la campaña 2016-17. En camino a su sexta temporada, acumula ya tres campeonatos, pero nunca se cansa de eso: “algo muy bonito, es una sensación inexplicable. Es una felicidad que nunca termina de ponerse vieja, dijo.

Pero aunque pasan los años, para el nativo de Guaymas, la entrega total, no es negociable: “como meta personal sinceramente, estar saludable. Trabajar fuerte día a día, sabemos que en el béisbol, uno nunca deja de aprender”, apuntó.

Y además del trabajo personal, el jugador de cuadro explica por qué este grupo, ha logrado tanto en el pasado reciente: somos una familia. Hay buena química, buena armonía. Yo creo que eso siempre ha sido una clave principal, para ser campeones”.

“El equipo Tomateros está hecho para ganar”, finalizó.