WILHEM RUIZ: UN TRAINNER DE ALTO NIVEL CON ALGODONEROS

Guasave, Sinaloa (Prensa Algodoneros).-Una constante en el desarrollo humano, es que para ser el mejor en tu rubro, debes de esforzarte, esperar el momento adecuado, pero, sobre todo, saber aprovechar las oportunidades que se presenten.

Lo anterior, es precisamente lo que está haciendo el trainer de Algodoneros de Guasave, Wilhem Ruiz, quien este momento trabaja en la preparación física del popular jardinero de Rays de Tampa Bay, Randy Arozarena, quien se encuentra en plena pretemporada para la campaña 2024 del beisbol de las Grandes Ligas.

Wilhem se ganó a pulso la oportunidad de trabajar con Randy Arozarena.

EL CAMINO AL TRIUNFO

Como un triunfo en la carrera de Wilhem puede catalogarse el hecho de que esté trabajando al lado de unas las grandes figuras de Grandes Ligas; ese camino empezó, gracias a que la gente que maneja la oficina de Arozarena se fijó en el trabajo que Ruiz ha venido desempeñando en su paso de siete años por la pelota profesional.

“La gente de la oficina de Randy consiguió mi teléfono y me llamaron para decirme que buscaban al mejor trainner de México (-sin presumir-, aclara) para que estuviera con él en la pretemporada y offseason, y me dijeron que estaba entre los seis candidatos para tomar la vacante.

Ruiz pasó todas las entrevistas y fue elegido por Randy y su equipo de trabajo.

“Todo esto comenzó con el proceso de entrevistas, que fue largo porque había semanas que no sabía nada. Conforme pasó el tiempo, recibí una llamada para decirme que había pasado a la segunda ronda, y así seguí hasta que llegué a ser de los dos finalistas. Hice la entrevista con otra persona, antes de que me mandaran con el propio Randy, lo cual fue algo muy satisfactorio para mí”, dijo muy emocionado, Wilhem.

Agregó que tres semanas antes de que terminara la temporada de invierno, en pleno proceso de entrevistas, elevó una plegaria que dio como resultado el ansiado llamado a trabajar con el que quizás es uno de los jugadores más populares del momento en Grandes Ligas.

La fe fue un factor primordial para que Wilhem alcanzara el objetivo.

SE LLEGÓ LA HORA

Una vez que hizo la última entrevista, Wilhem viajó a Tampa Bay a encontrarse con Randy, con quien empezó a trabajar en un programa de fortalecimiento físico, previo a la pretemporada de Rays, que hoy en día se desarrolla en Port Charlotte, Florida.

“Cuando llegué a Florida, me platicaron que el año pasado, Randy bajó su rendimiento en la segunda parte de la temporada debido al cansancio físico y a la pérdida de peso, por lo que comenzamos con un programa de ejercicios para ganar volumen, lo cual, se logró, pero ahora que estamos en la pretemporada, tenemos que hacer que su masa muscular se compacte a base de un programa de potencia y hacer una readaptación a campo de beisbol.

El objetivo del trabajo es que Randy mantenga la intensidad física durante toda la temporada.

“Randy tuvo un problema de rigidez en la espalda baja, pero le di terapia a base de movilidad en las caderas. Ya las últimas dos semanas que me quedan serán de fuerza explosiva, trabajando pierna, terapias y sobre todo estiramiento, porque como ganó mucha masa muscular no quiero que se sienta rígido y falto de agilidad a la hora de batear o fildear”, explicó Ruiz,

Agregó, que muchas veces, la falta de agilidad viene cuando se gana masa muscular, pero él considera que eso es un mito, y puso de ejemplo el caso del velocista jamaicano, Usain Bolt.

“Bolt tiene mucha masa muscular, pero su agilidad es mucha, así que eso le expliqué a Randy y a su gente, quienes estaban preocupados por eso, pero ya con el trabajo que estamos haciendo vamos a salir bien. Ahorita estoy con su programa de tiro con bola pesada, y ya él en el campo sigue con el proceso de bateo y fildeo”, mencionó Wilhem.

Randy aumentó mucho su masa muscular.

El objetivo de todo el trabajo mencionado, es que Randy tenga, en primer lugar, una temporada libre de lesiones, y en segunda, que su capacidad física no baje de intensidad en toda la temporada.

UN CAMPEÓN INDISCUTIBLE

Wilhem, quien es nativo de Cuautitlán Izcalli, Estado de México, tiene ocho años trabajando como trainner en el beisbol profesional, en una carrera que comenzó desde las sucursales

Durante su paso por la pelota de paga mexicana, ha sido campeón en donde ha trabajado, sin embargo, solo le hace falta el título en la Liga ARCO Mexicana del Pacífico, para presumir que ha sido monarca en todos los circuitos profesionales del país.

“He sido campeón en todas las sucursales de México. Liga Norte, Academia, Liga Invernal Mexicana, dos veces en la zona norte de LMB y en de la Serie del Rey, por eso solo me falta un título en la Liga ARCO, del cual estuve cerca con Algodoneros de Guasave hace un par de años. Ojalá y pronto se me dé, para poder presumir que he sido campeón en todas las ligas profesionales de México”, comentó en tono muy emocionado.

UNA ETAPA DE SU VIDA QUE POCOS SABEN

En el 2007, Wilhem tuvo su primer contacto con el beisbol profesional, pero no fue en calidad de trainner, sino como lanzador, al ser firmado por el scout mazatleco Leo Figueroa, para Sultanes de Monterrey.

“Firmé con Sultanes en el 2007 y estuve con ellos hasta en el 2011, ya que, tras haber jugado en todas las sucursales, no pude debutar con el equipo grande, lo cual me obligó a reconsiderar y entrar a la universidad, becado al 100 por ciento, gracias al beisbol.

Leo Figueroa lo firmó como pítcher y luego le enseño los secretos del scouteo.

“Ahí terminé mi carrera de fisioterapeuta, para luego hacer una maestría en fisioterapia deportiva. Curiosamente con el primer equipo que trabajé a nivel Liga Mexicana, fue con Sultanes de Monterrey, y en mi primer año, Leo Figueroa me enseñó mucho de los secretos del scouteo, con el fin de ejercer ese rol, pero preferí dedicarme de tiempo completo a mi trabajo como trainner”, puntualizó.

Sin duda, una historia interesante la de Wilhem Ruiz, quien hoy está recogiendo los frutos del trabajo arduo que ha hecho en poco más de una década.

Randy Arozarena y su equipo, están complacidos con el trabajo de Wilhem.